Las empresas de Irlanda del Norte deberán dedicar mayores esfuerzos a la salud de sus colaboradores para alcanzar un alto desempeño en 2021 y formar parte de la recuperación económica de Irlanda del Norte.
Ese es el punto de vista externado por John Ryan, director general y fundador de Healthy Place to Work, en ocasión del lanzamiento de la norma internacional para la certificación de lugares de trabajo saludables en Irlanda del Norte esta semana (11 de enero).
Ryan, quien encabezó la reconocida certificación del Great Place to Work Institute en Irlanda, lanza Healthy Place to Work tras un período de desarrollo de cuatro años y afirma que las empresas, hoy más que nunca, deben tomar en cuenta la salud de sus organizaciones. Los directivos de la empresa local de networking Business in the Community (BITC) concuerdan con él y han dado su respaldo a la certificación, por lo que ahora la recomiendan a sus más de doscientos asociados.
“El 2020 ha puesto de manifiesto la importancia de la salud, hoy más que nunca. Y ahora las empresas deben dedicar recursos a aquellas áreas que más lo necesitan si desean prosperar”, dijo Ryan. “Esto implica analizar con un punto de vista estratégico la forma en la que la salud de los colaboradores impacta directamente en el negocio. Esto les permitirá a los líderes empresariales y a los colaboradores trabajar juntos para contribuir a la recuperación económica de Irlanda del Norte tras el paso de la COVID-19.
“A lo largo de los últimos cuatro años, hemos desarrollado un enfoque estratégico de salud y bienestar organizacionales basado en evidencia y sustentado en datos. “Hemos trabajado con varias organizaciones importantes, entre ellas Version 1, la Irish Rugby Football Union, Salesforce y BT. Hemos llevado a cabo pruebas piloto con las herramientas y la metodología, lo cual les ha permitido reunir información sobre la salud de sus organizaciones, entender qué deben hacer para mejorar dicho aspecto y comparar sus progresos con puntos de referencia. Ahora estamos listos para poner Healthy Place to Work a la disposición de todas las empresas y organizaciones del Norte de Irlanda.
La perspectiva tradicional de la salud en el lugar de trabajo se ha centrado en la enfermedad y las formas de evitarla, tal y como quedó demostrado con el lanzamiento de informes sobre ausentismo en el Servicio de Administración Pública y los Consejos de Irlanda del Norte. Healthy Place to Work sostiene que desde el punto de vista económico es más inteligente para los lugares de trabajo capitalizar los factores que promueven la salud y adoptar un enfoque renovado que se centre en la salud, más que en la ausencia de esta, a fin de producir mejoras en el individuo, la economía y la sociedad.
“En los últimos meses, hemos visto al Auditor General de Irlanda del Norte revelar que la tasa de ausentismo por enfermedad en la Administración Pública de Irlanda del Norte ha costado al erario público £32.9 m y ha limitado su capacidad de operar, mientras que el Consejo de Irlanda del Norte tiene los niveles más altos de ausentismo por enfermedad en el Reino Unido. Esto simplemente no es sostenible. Es hora de ver más allá de las cifras de negocios y empezar a entender los factores que las motivan. Las organizaciones deben crear lugares de trabajo a los que la gente disfrute ir y en donde su trabajo pueda alcanzar los más altos niveles de excelencia”.
Los líderes deben crear culturas saludables que propicien el alto desempeño
Si bien es cierto, afirma Ryan, que muchas organizaciones han incluido la salud de los colaboradores en sus programas, los enfoque al respecto son, en la mayoría de los casos, circunstanciales más que estratégicos. Actualmente, en un mundo en el que las necesidades sanitarias de las naciones están creciendo de forma exponencial y la capacidad de los gobiernos para satisfacerlas está disminuyendo, les corresponde a las empresas poner manos a la obra, ser estratégicas y asumir el liderazgo en este sentido.
“Las empresas pueden darle un giro a la salud de sus colaboradores y marcar una diferencia real y significativa en la vida de la gente. Pueden influir en una fuerza laboral mundial de 3 mil 500 millones de personas, la mitad de la población del planeta. Pueden ayudarles a vivir de forma más saludable. El bienestar no se crea marcando opciones en un formulario; hay que replantear desde la raíz nuestra definición de persona sana y lugar de trabajo saludable. Lo maravilloso es que esto beneficia los intereses de las empresas a corto y largo plazo; quienes se coloquen a la cabeza primero, cosecharán los mejores frutos”, explica Ryan.
Hughes Insurance, una empresa de Liberty Mutual Insurance Group, es la primera organización de Irlanda del Norte en emprender el proceso de certificación de Healthy Place to Work. Sarah Balmforth, jefa de Recursos Humanos en Hughes Insurance, explica las razones por las que la compañía está buscando certificarse:
“A lo largo del año pasado, en Hughes Insurance pivotamos con éxito para garantizar nuestra capacidad de seguir ofreciendo el elevado nivel de servicio que los clientes esperan de nosotros. Durante este tiempo, nuestro objetivo ha sido darle prioridad a la salud y el bienestar de nuestros colaboradores, quienes han tenido que enfrentarse al desafío de trabajar desde casa y sobrevivir a una pandemia. Esta experiencia nos ayudó a comprobar, hoy más que nunca, que la salud y el bienestar merecen ocupar un lugar estratégico… un lugar que al final produzca un impacto en los resultados netos. Con esta idea en mente, queríamos trabajar con expertos que pudieran orientarnos y asesorarnos durante el proceso requerido para incorporar de verdad una estrategia de salud y bienestar. Healthy Place to Work nos brinda eso”.
La empresa internacional de consultoría en TI y servicios administrados con presencia en Irlanda, la India y el Reino Unido, Version 1, que recientemente generó 70 plazas laborales para especialistas en Belfast, se encuentra entre las primeras organizaciones en incorporar el proceso de Healthy Place to Work a su estrategia de negocios. El director de Gente y Éxito, Jarlath Dooley, señala que adoptar el enfoque de Healthy Place to Work ha generado dividendos:
“Version 1 ha cosechado los frutos de Healthy Place to Work desde 2018. Tenemos una extensa fuerza laboral distribuida en cinco países, así que para nosotros es importante que exista sinergia en el enfoque de salud y bienestar del equipo en todas nuestras operaciones. Healthy Place to Work nos ha permitido poner en marcha iniciativas y procesos de salud laboral de probada eficacia como instrumentos para fortalecer la salud tanto individual como organizacional, sin distinción. El enfoque sustentado en datos nos permite hacer comparaciones con puntos de referencia y mantenernos al tanto de nuestros avances, lo cual nos da la seguridad de estar avanzando en la dirección correcta con nuestra estrategia de salud para los colaboradores”.
Kieran Harding, director gerente de Business in the Community en Irlanda del Norte, explica por qué la organización ha dado su respaldo a Healthy Place to Work:
“En Business in the Community, buscamos inspirar y apoyar a las empresas para que se conviertan en fuerzas positivas. Cuando nuestros directivos escucharon sobre los objetivos de Healthy Place to Work, notamos que había una clara sinergia con nuestras metas. Al igual que nosotros, Healthy Place to Work motiva a las empresas a actuar de manera responsable, en este caso en lo relativo a la salud y el bienestar de su gente. El proceso de certificación está bien pensado y ha pasado por pruebas rigurosas, así que considerando su afinidad con nuestro enfoque como organización, tenía todo el sentido para nosotros recomendar a Healthy Place to Work con nuestros asociados”.